Sale el sol?

Siempre te dicen que las cosas van a mejorar, que después de la tormenta de meses o años, sale el sol. Te dicen que el desamor se remedia con el tiempo, que la soledad siempre es reemplazada y que tu final feliz algún día va a llegar, cuando tenga que ser. Mientras tanto, sufrí. Sufrí de lo lindo que como todos te dicen algo bueno, algún día va a pasarte. Quedate con eso. Yo no quiero quedarme en, ni con eso. Prefiero parar. No voy a seguir sabiendo que estoy mal, es extorsivo y masoquista hacerlo cuando no querés. Cuando no podes. Creo que uno no entiende las cosas hasta que llega al borde del precipicio, uno no entiende hasta que no cae y tiene que volver a levantarse o simplemente, ya es tarde para reaccionar. Pero, lo cierto es que aquel que no se siente así nunca, pero nunca va a poder entender a aquel que lo siente. Ningún consejo, ni palabra, ni frase que des va a ser válida. Primero sentilo y después hablamos del tema. Primero sentí el vértigo de vomitar cada vez que comas, que te duela la garganta, el pecho y que los ojos te queden llorosos de tanto forzar la realidad. Primero sentí el vacío de no comer y hacer ejercicio sin nada que quemar. Primero sentí esa agonía que nadie puede curar. Primero sentí ese frío que ni una colcha ni un buzo pueden calentar. Primero llorale a tu imágen frente al espejo y mal decite hasta que te quedes sin palabras. Primero quedate sola, no poseas compañía ni cuando más la necesites, ni cuando te estés desangrando, ni cuando estés tirado en el suelo, ni cuando necesites reír o llorar. Primero entendé que si uno no sintió tal o cual cosa, no puede entender al que si pasó por ello. Así que, los que no saben, mejor cierren la boca. Y los que sí, ya saben como me siento. Así de vacía, fría y resignada.